HISTORIAS DE ÉXITO DE TILDA

- Sí, soy Frank Adebiaye, contable colegiada y diseñadora tipográfica. También escribo artículos y poesía, así que soy a la vez administrativa y creativa.

Hace más de 10 años fundé Velvetyne Type Foundry. Es una de las principales fundiciones tipográficas de código abierto del mundo. Y estoy muy orgulloso porque tenemos una comunidad enorme con muchos diseñadores tipográficos que participan para aportar más diversidad a la tipografía y experimentar con la forma.

- Creo que ya hay más de 100 tipos de letra disponibles en Velvetyne y más de 15 miembros. A medida que pasa el tiempo, involucramos a más y más mujeres en esta aventura, así como la diversidad de género, y la escritura inclusiva -hemos empezado a trabajar con huérfanos recientemente.

Estamos a punto de lanzar la fuente para el Tifinagh, que es un idioma en Marruecos. Y estoy orgullosa de participar no sólo en la tipografía latina, sino también en la tipografía mundial.

- Mi pasión por la tipografía empezó reparando una impresora láser y enviando cartas de amor impresas, porque mi letra es horrible y soy zurda. Entonces me di cuenta de la diferencia entre la fuente en la pantalla y la fuente impresa y me pareció muy interesante. Así empezó todo.

No vengo de una familia creativa: Mi padre también es censor jurado de cuentas. Cuando era joven, tenía un ordenador en casa y lo utilizaba para sumergirme en campos creativos. No fui a ninguna escuela de arte, pero con la ayuda del ordenador aprendí a hacer hojas de cálculo y también a crear cosas nuevas. Y ahora sigo utilizándolo de las dos formas.

- Empecé a diseñar páginas web hace muchos años. Por aquel entonces, diseñaba con Adobe Dreamweaver. También codificaba sitios web, a veces con HTML y XML, a veces hacía cosas bastante complejas con JavaScript, etc. Así que codificaba y llegó un momento en que me di cuenta de que necesitaba avanzar en mi actividad: no puedo hacer las cosas yo sola, tengo que involucrar a otras personas y, por lo tanto, el proceso de diseño debería ser más accesible.

Y entonces descubrí Tilda porque pertenezco a ese tipo de comunidad. Recibí un boletín sobre el lanzamiento de la fuente oficial de Tilda , Tilda Sans. Entonces me sumergí en este constructor y descubrí que puedo hacer muchas cosas con él.

- Lo que me gusta de Tilda es que es a la vez un constructor y una guía para construir páginas web atractivas. Eso es lo que me ha seducido, porque cuando desarrollas una página web utilizando código, tiendes a quedarte en tu propia mente y en tu propio mundo -créeme, he pasado por eso.

Al crear una página a partir de bloques de Tilda, a menudo se te pide que proporciones cierta información en la que nunca habrías pensado si estuvieras creando un sitio web por tu cuenta. Si tienes un bloque con tres iconos, por ejemplo, tienes que explicar tus tres características principales o tres propuestas de valor clave. Te reta a pensar en tu valor y en tu oferta, en lo que quieres vender o en lo que quieres mostrar o explicar. Es un material muy bueno.

También está más integrado con los medios sociales porque cuando diseñas una página web con Tilda, podrás configurar una página SEO para que se muestre en la búsqueda de Google, y también en Twitter, Facebook, LinkedIn, etc.

He notado que con varias páginas web que he diseñado con Tilda la gente prestaba más atención a mi mensaje porque se muestra muy bien en el smartphone. Así la gente puede consultar una página web muy fácilmente. Y para mí no supuso un esfuerzo tremendo crear esta página. Así que todos salimos ganando.

Y gracias también por involucrar a la comunidad tipográfica e implicar mucha conexión con la tipografía a la plataforma, ya sea Google o Adobe o directamente fuentes web autoalojadas. ¡Es muy importante para que el mensaje llegue!

- En la subjetividad. Me explico. Hay una especie de subjetividad en cómo algunos de mis tipos de letra funcionan bien con ciertas letras y son menos eficientes con otras, como una persona que es más capaz de pronunciar ciertas palabras y se siente menos a gusto pronunciando otras.

Así que me dio la idea del tipo subjetivo y lo llamé "Letras subjetivas". Es otra forma de hacer las cosas: Hay un conjunto común de glifos, y cuando se vende un ejemplar, diseño un glifo exclusivo para poner en el ejemplar específico. Si compras un ejemplar, puedes vender otro. Y entre lo que compras y lo que vendes puedes hacer todas las modificaciones que quieras.

- Me considero un diseñador consumado, dedicado a hacer que las cosas funcionen. Digamos que tienes un proyecto y necesitas que la contabilidad sea sólida y viable, pero también necesitas que la tipografía sea atractiva y que la comunicación sea eficaz. Y todo esto es diseño de trabajo. Así que eso es lo que hago ahora.